Llamado "el vinagre de los antiguos egipcios". Es el primer vinagre utilizado por el hombre por al menos 5000 años.
La miel es una materia prima de altísimo valor biológico. Sólo considerando el tipo de azúcares (glucosa y frutctosa, principalmente) nos podemos dar cuenta de la gran superioridad del vinagre de miel en comparación con los elaborados de un solo fruto (por ej., manzana, uva).
El vinagre de miel proviene de soluciones de miel en agua transformadas a través de la fermentación alcohólica, en primer lugar, y luego acética.
La miel es una materia prima de altísimo valor biológico. Sólo considerando el tipo de azúcares (glucosa y frutctosa, principalmente) nos podemos dar cuenta de la gran superioridad del vinagre de miel en comparación con los elaborados de un solo fruto (por ej., manzana, uva).
El vinagre de miel proviene de soluciones de miel en agua transformadas a través de la fermentación alcohólica, en primer lugar, y luego acética.
La calidad de un vinagre es directamente proporcional a la calidad de la materia prima y al proceso productivo.
En algunos países, la única razón de la disminución en el uso de este producto no está en la calidad sino en el precio muy alto de la materia prima. Por ejemplo, si se comparan tres materias primas con las que se produce vinagre: la uva, la manzana y la miel, nos damos cuenta de que la miel cuesta al menos de 5 a 20 veces más.
Se debe tener en cuenta que el precio está justificado por el altísimo valor biológico de la miel.
El hidromiel y el vinagre de miel constituyen las preparaciones fermentadas más antiguas de la humanidad: la primera, sobre la base de la fermentación alcohólica de mezclas de agua y miel, y la segunda, obtenida por fermentación acética.
Si se considera al hidromiel la más antigua bebida alcohólica, en consecuencia el vinagre de miel es el primer vinagre utilizado por el hombre.
Si bien en el Código Alimentario Argentino ambas preparaciones están consideradas, en nuestro país no existe una tradición en el consumo, por lo tanto no se elaboran a nivel industrial. Lo contrario ocurre en otros países, principalmente de Europa, donde presentan mayor relevancia.
Según la información obtenida, en nuestro país, anualmente se organizan en distintas instituciones cursos de capacitación para la elaboración de estas bebidas. Siendo preparaciones de sencilla elaboración, pueden presentarse como otra alternativa al uso de los derivados de la miel y de los otros productos de la colmena.
El vinagre cuenta con numerosos usos, incluso como bebida refrescante.
Las ensaladas, todas las verduras, las salsas y los agridulces causarán asombro por el excepcional sabor y aroma, la digestión se verá facilitada y el bienestar aumentará.
El vinagre de miel debe ser presentado con especto límpido, o ligeramente opalescente, color ámbar, y olor y sabor agrio, agradable, que recuerda a la miel. (Exigencias analíticas: Densidad a 15º 1,20 a 1,47; residuo seco 1,0 a 3,0%; acidez total en ácido acético 4,0% y alcohol, por ciento en volumen a 15º, vestigios.)
No debe acusar reacción positiva de dextrina (eritodextrinas), que revelan la presencia de glucosa industrial en el producto.
La razón de la caída del consumo del producto no es la calidad, sino el precio, muy alto de la materia prima. Por ejemplo, si se comparan tres materias primas con las que se produce vinagre, manzana, uva y miel, se puede notar que la miel cuesta entre 5 y 20 veces más. Sin embargo, el precio está justificado, por el altísimo valor biológico del componente. No existen límites para su empleo, incluido el uso como bebida refrescante y corroborante. Las ensaladas, los agridulces, causan asombro por su excepcional sabor y aroma; la digestión se facilita y el bienestar aumenta.
Aunque después de siglos de experimentación el vinagre de manzana ha resultado ser benéfico para todo el metabolismo humano y animal, por las consideraciones hechas sobre la materia prima, el vinagre de miel debería ser aún más benéfico
Las ensaladas, todas las verduras, las salsas y los agridulces causarán asombro por el excepcional sabor y aroma, la digestión se verá facilitada y el bienestar aumentará.
El vinagre de miel debe ser presentado con especto límpido, o ligeramente opalescente, color ámbar, y olor y sabor agrio, agradable, que recuerda a la miel. (Exigencias analíticas: Densidad a 15º 1,20 a 1,47; residuo seco 1,0 a 3,0%; acidez total en ácido acético 4,0% y alcohol, por ciento en volumen a 15º, vestigios.)
No debe acusar reacción positiva de dextrina (eritodextrinas), que revelan la presencia de glucosa industrial en el producto.
La razón de la caída del consumo del producto no es la calidad, sino el precio, muy alto de la materia prima. Por ejemplo, si se comparan tres materias primas con las que se produce vinagre, manzana, uva y miel, se puede notar que la miel cuesta entre 5 y 20 veces más. Sin embargo, el precio está justificado, por el altísimo valor biológico del componente. No existen límites para su empleo, incluido el uso como bebida refrescante y corroborante. Las ensaladas, los agridulces, causan asombro por su excepcional sabor y aroma; la digestión se facilita y el bienestar aumenta.
Aunque después de siglos de experimentación el vinagre de manzana ha resultado ser benéfico para todo el metabolismo humano y animal, por las consideraciones hechas sobre la materia prima, el vinagre de miel debería ser aún más benéfico