06 de maig 2012

CERA DE ABEJA SIN RESIDUOS QUÍMICOS, ORGÁNICA Y ECOLÓGICA.

Las sustancias químicas son, en la actualidad, una de las mayores amenazas para toda forma de Vida en nuestro planeta. Tienen efectos teratogénicos (malformaciones fetales y congénitas), carcinogénicos (inducen el desarrollo de formaciones tumorales), mutagénicos (provocan mutaciones en las células, la base de los procesos cancerígenos) y disminuyen la fertilidad. 

Se comportan también, en ocasiones, como disruptores endocrinos y mensajeros químicos, es decir, actúan de manera análoga a como lo harían determinadas hormonas, biocatalizadores, enzimas o moduladores habituales y normales del metabolismo y reacciones químicas del organismo. Los “sustituyen” y suplantan, asumiendo sus funciones, actuando como si fueran ellos, haciéndolo de manera persistente y continuada y no cuando los mecanismos reguladores de la homeostasis interna de los seres vivos lo requieren, lo que ocasiona diversos trastornos, enfermedades y alteraciones. En el contexto de la apicultura, aunque los estudios son escasos, ya se ha demostrado que dañan a las abejas, la miel y, por extensión, al apicultor y la apicultura, comprometiendo su futuro.